Dicen que cuando el amor es verdadero no hay estrategias ni juegos que valgan. Hay amor, o no hay amor. Se ama o no se ama. No hay un gris, hay blanco o negro.
Pero siendo precavidos y habiendo probado toda clase de medios, la realidad dista mucho de todas esas historias de príncipes y princesas que nos contaron hasta la saciedad de pequeños, y pongamos que yo creo fervientemente en el príncipe azul. No obstante, no hay que olvidar de que somos humanos...y, por tanto, nos equivocamos o discernimos muchas veces de nuestro pensamiento inicial. Ello no quita para que una de las partes, ponga tierra de por medio y decida diluir todo ese amor principal y convertirlo en un nada, en un "si te he visto no me acuerdo".
Claro que la otra parte, tiene dos opciones...lamentarse hasta la saciedad, dejar entrever todo el dolor que le ha provocado esa ruptura o, en el mejor de los casos, actuar de puertas para afuera con la mayor frialdad posible y dejar intuir que esto está más que superado.
Obviamente, la mejor manera de ver el problema matemático es con una aplicación práctica:
"Hace unos meses, fueron ustedes testigos en uno de mis artículos, de mi historia de amor. EL había aparecido. El amor parece que se había apoderado de mí....y por muchos años. Claro que quien dice años, en un pensamiento inicial, pasa a decir, meses, semanas o cuestión de días.
Tras unos meses de puro amor.....y otro tanto de extremadas turbulencias....el final se veía cada vez más próximo. No obstante, cargar con una persona a la que desconoces durante semanas no fue fácil; y a ello añadamos que yo seguía siendo la misma dulce y tierna con todo el amor para darle.
Llegó un día, en que cansado de esperar a que fuera yo, la que tomara la decisión (sometida a sus continuas provocaciones)...decidió terminar con esos meses de profundo amor. Lo mejor, sin embargo, estaba aún por llegar. Esa invitación a dejarme .....podría haber llegado vía fax, teléfono, email, cara a cara, whatsapp....pero no fue así...Que me deje Mark Zuckerberg vía facebook sería justificable....porque fue el creador....¿pero tu novio?¿Cómo le contaría yo a mis amigas tal atrocidad? Sería el hazmereir durante décadas.....y no estaba dispuesta a ello. Así que una vez, curada del impacto inicial.....indagué en sus palabras y me dispuse a justificar lo justificable (como hacemos todas, no nos engañemos). Comprendí todas sus frases...y supe, es más, me convencí, de que me dejaba porque me quería. Por ello, no dudé ni un minuto en llamarlo una, dos, ocho veces si hiciera falta. Como era de esperar, no me contestó; le envié un email, como era de esperar, tampoco me contestó. Le envié otro mensaje, no hubo respuesta. Lo vi "online" en el whatsapp así que decidí probar este medio por si no había recibido los anteriores (muy probable, jaja)...pero tampoco me contestó. Parece que Internet no quería funcionar ese día. Así no me podía quedar.......por eso, lo busqué por todos los bares de su asiduidad pero ni rastro. ¿Le habrá pasado algo? ¿Habrá tenido un accidente de tráfico? Fui hasta la casa.....y de repente me lo encontré.....ahí más tranquilo que nadie; ninguna de las hipótesis anteriores se vieron justificadas. Le supliqué con un mar de lágrimas de volver...una y otra vez.......y, así fue como volvimos.....
Obvioooooooooo que no fue así....¿qué especie humana hubiera cedido ante una pérdida de dignidad de tal calibre?¿qué especie humana, si es especie, permitiría ver tal espécimen rendido ante sus pies y después volver? NADIEEEEEE.
Las relaciones de amor, son más sencillas de lo que parecen, basta cogerle la vuelta.
Volvió por las siguientes razones:
Día 1) No le respondí.
Día 2) No le respondí.
Día 3) No le respondí y encima me lo encuentro por la calle POR CASUALIDAD...... Un me juego a esconderme para no pasar por tal calvario de verlo de frente y un me lo vuelvo a encontrar de frente y nos saludamos friamente.
Día 4) Se dio cuenta a tiempo de lo que perdía.
Día 5) Estamos juntos más enamorados que aquella primera vez.
Lo mejor de ser dejado: que te quitas la responsabilidad de volver.
Lo peor: que si quieres volver te tienes que mantener...con dignidad, sin forzar a la "víctima"y tragarte las lágrimas.
Pero, aún así, me pregunto...¿por qué si realmente, me quiere y hoy día estamos juntos mejor incluso que aquella primera vez, no hubiera servido el me arrastro, te muestro cuánto estoy dolida, te fuerzo a volver por medio de un chantaje emocional?
Explicación lógica, no hay. Simplemente que los humanos somos así y hay que aceptarlo...nos guste o no. No se trata de montar una estrategia en cada momento...sino de dar todo el amor que tenemos para dar cuando el viento se nos presenta a favor....y cuando no....no nos queda más que dejar espacio para que la persona piense, reflexione...te extrañe...y sepa lo que perdió.....porque recordemos que todos somos SERES ÚNICOS E IRREPETIBLES, hasta que se demuestre lo contrario