El poney ese mamífero indefenso que tantas alegrías me causó en la infancia y que no me dejó caer ni una sola vez al arenado.....hoy día me ha causado más que otro disgusto. Sino, vayamos por partes para entender la teoría del poney....porque por más que ustedes nunca hayan montado en poney o no recuerden la última vez que lo hicieron; puede que esa última vez esté más cerca de lo que imaginan....
A todos nos han enseñado desde siempre que tenemos que ser los mejores, los más guapos, los más inteligentes, divertidos y triunfar incluso sin haber hecho nada para ello. Por ello...partiendo de ese perfil...todos nos esforzamos en ser o, en el peor de los casos, en hacer parecer que hemos conseguido todo aquello que se nos implantó desde pequeños....
Y es ahí cuando empieza nuestra andaduras en poney.....que no es más que la creación de una situación ficticia.....que nos hace crecernos a nosotros mismos hasta el infinito...pensando que tal o cual situación es real, mágica. Nos sentimos espléndidos, dioses del universo....Pero ojo que nadie dijo que esa situación fuera eterna.........porque qué bello es andar en poney creyéndonos llevar las riendas del caballo de Troya.El pequeño detalle y que nos diferencia del mismo es que......caer de un caballo como el de Troya es elegancia, es fortaleza es caballería.....pero caer de un poney....de una situación hilada a nuestro antojo ¿qué es? ¿Es el ridículo más grande jamás visto? ¿es la vergÜenza superpuesta a nuestra altanería?¿es la aceptación de un presente viciado?
Digan lo que digan...está bien ir en poney de vez en cuando......creernos ser los reyes de Sabá, creernos tener el mundo a nuestros pies, las posibilidades al alcance de nuestra mano....cuando en realidad no somos más que uno más que pasamos por aquí por la tierra, seres mortíferos como todos y que constituimos una ínfima parte de la ínfima parte de todos los seres que componen este planeta.
Qué agradable la sensación de poner la música a todo volumen, sentir un subidón por tal o cual situación,cierta o no, y pensarnos que vamos a 200km/h cuando en realidad no vamos sino cumpliendo lo que las señales nos piden. O levantarnos de la cama pensando que nos vamos a comer el mundo y al día siguiente que el mundo nos coma a nosotros.
Y ese es el problema de montar en poney, que como es ficticio, creamos tantos castillos de arena en el aire, tantas fantasías inimaginadas que cuando caemos..es como si toda nuestra altanería se convirtiera en ceniza, en polvo. Para colmo la vergüenza que se pasa es dos veces mayor. Porque montar en caballo es elegante y se necesitan clases para hacerlo bien....pero montar en poney todo el mundo puede hacerlo...hasta el ser más odiado .....pero caer con clase..... eso es SOLO COSA DE UNOS POCOS!!!!!!!!!!!
